2017 Jose Viera Publications
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Orando a Dios por ti
por José M Viera

Oh, Santo Dios, Creador del Cielo y
la Tierra. Tu Nombre es Infinito. Y tu
amor es inagotable. En esta hora te
pido que bendigas a todos los que
están escuchando estas palabras. Te
pido por fortaleza, para todo aquel
que se encuentra débil y cansado.
Suplico por Tu divina protección, y
que mientras transitamos por este
mundo agitado, podamos ser
protegidos por Admirable amor.

En esta hora, te pido que sanes a los
que están afectados de salud. Para Ti
no hay nada imposible. No hay
enfermedad, pequeña o catastrófica,
que pueda resistir Tu asombroso
poder. No hay enfermedad o dolencia
que te desafíe, por eso, en esta
misma hora te alabo, te doy gracias y
declaro “milagro de sanidad”.

Oh Dios Compasivo, mira al que llora
de angustia y desesperación. Ten
compasión de los que sienten el
corazón pesado, que están cargados
de problemas, inquietudes o
preocupaciones. Te pido que tu Paz
celestial descienda y que Tu Amor
levante y restaure ese corazón que
busca la solución a sus problemas.

Mira, Señor, los matrimonios que son
el blanco de los ataques del enemigo.
Te pido que los protejas. Te pido que
les des unidad y amor. Qué busquen
en Tu Presencia la inquebrantable
Roca de Protección. Qué no se
destruyan. Qué no se separen. Qué
busquen en Ti el camino a la victoria,
al fortalecimiento y a la
reconciliación.

Te pido, Señor, por esas indefensas
criaturitas (por los niños). Te pido
que los protejas de la maldad y el
peligro. Qué Tu Presencia los cubra
de la cabeza a los pies. No permitas
que sean secuestrados, maltratados o
abusados. Te pido que vivan su niñez
en amor, en inocencia y en
tranquilidad. Ellos son tuyos, oh Dios.
Te pertenecen a Ti.

Mira, Señor, a los que son
perseguidos porque simplemente los
han categorizados de ser diferentes.
Padre Santo, que el racismo muera y
desaparezca para siempre, para que
todos comprendamos que
procedemos de Ti. Ayúdanos a
destruir las etiquetas con las cuales
nos hemos separados los unos de los
otros. Qué comprendamos, de una
vez y para siempre, que en esta
Tierra hay una sola raza, y esa es la
raza de los seres humanos, Tus hijos
e hijas, Oh bendito Creador. Todos,
sin acepción alguna: procedemos de
Ti. Dios mío, ayúdanos a comprender
esa verdad tan fundamental para
nuestra supervivencia.

Te pido, Señor de gloria, que los que
transitan por esta vida sin Ti, puedan
llegar al conocimiento del bendito y
poderoso Evangelio. Te pido que
acudan a Ti, en esta misma hora, y
que se rindan incondicionalmente a
tu glorioso Amor.

Te doy gracias, oh Señor, porque no
hay nada más hermoso y efectivo
que hablar contigo en la oración. En
tu dulce y maravilloso Nombre, Amén.
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Escrito por José M. Viera
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